El Coronavirus ha transformado por completo nuestras vidas, en esta nueva “normalidad” hacemos cosas antes impensables: llevar mascarilla durante todo el día, obsesionarnos con el gel hidroalcohólico, reducir nuestros contactos y salidas…
El mundo de las bodas no ha sido menos y también se ha puesto patas arriba. Las múltiples restricciones y los constantes cambios en la normativa pueden hacer que surjan dudas, pero aquí os las vamos a resolver. Para los que andáis aún despistados, estas son las restricciones existentes a nivel nacional:
- Uso obligatorio de mascarilla, durante la ceremonia y en el banquete mientras no se beba o coma.
- Respeto de la distancia de 1,5m de seguridad entre grupos de personas no convivientes.
- Máxima higiene de manos, esta es una medida básica en nuestro día a día para luchar contra el virus.
- Queda establecido un máximo de 10 invitados por cada mesa.
- Queda prohibido bailar y fumar, siempre que no se pueda guardar una distancia de 2 metros entre fumadores.
Además de estas medidas cada Comunidad las amplia según sus criterios sanitarios. Las de la Comunidad de Madrid, la que a nosotros nos afecta, son las siguientes:
- Reducción del aforo al 60% tanto en la ceremonia como en el banquete.
- Quedan prohibidos los aperitivos y el cóctel, estos tendrán que transcurrir con los invitados ya ubicados en su mesa.
- El número de comensales por mesa quedará reducido a 6.
- La celebración finalizará a la 01:00.
- El salón de banquetes o finca deberá de disponer de los datos personales y de contacto de todos los asistentes a la celebración para su pronta localización en caso de un brote de coronavirus.
En Madrid existen municipios con más restricciones por sus condiciones sanitarias, y en estos el aforo se verá reducido al 50% y la celebración deberá de finalizar a las 22:00 horas.
En el Palacete de la Ochava, además de seguir estas normativas al pie de la letra tomamos precauciones extra:
Disponemos de un equipo de sanitarios en cada evento que realizamos y a todos los invitados se les toma la temperatura a la entrada a la finca y se les mide la saturación de oxígeno, si alguno de estos parámetros diese un resultado poco fiable, procedemos a la realización de un test rápido. Con esto pretendemos, en la medida de lo posible, evitar contagios durante la celebración del gran día.
Nuestro equipo siempre se pone en el lugar de los futuros novios y les acompaña durante el largo camino que es la planificación de una boda. Ahora más que nunca, estamos a vuestro lado y comprendemos los miedos e inseguridades a la hora de dar el gran paso en esta “normalidad”.
Las bodas, hoy en día, suponen un riesgo, pero un riesgo que no es mayor que el ir al parque, a la playa, al colegio o al trabajo. El coronavirus ha venido para quedarse y hay que aprender a convivir con él.
Las bodas se convertirán en celebraciones más íntimas, nos acompañarán en este gran día nuestros familiares y amigos. Los imprescindibles, los de verdad.
No hay que olvidar que lo importante en este día es dar el “Sí, quiero”, a tu mitad, y esto siempre será perfecto sea cual sea la adversidad.